El 8 de octubre pasado se reunió el dictador de turno en Cuba Miguel Mario Díaz-Canel con una parte de la comunidad LGBTIQ+ de Cuba. No es nada casual, que la dictadura haya escogido la fecha de la muerte del Che Guevarra para este encuentro, una de las personas más homofóbicas que han existido.
Como es sabido a esta reunión con Díaz-Canel en el Palacio de la Revolución asistieron, los miembros de la comunidad LGBTIQ+ que simpatizan con el discurso de la dictadura, y que no han mostrado irreverencia al sistema.
Comunidad LGBTIQ+ de Cuba.
Sabemos que la comunidad LGBTIQ+ ha sido una de las más perseguidas y discriminadas en Cuba desde el mismo año de la llegada de Fidel Castro al poder en 1959.
Todos conocemos como entre los años 1965 y 1968 los homosexuales, religiosos y los clasificados como antisociales y contra revolucionarios, fueron recluidos en las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), que prácticamente eran campos de concentración de trabajo forzados, según la dictadura tenían que ser reeducados por el gobierno revolucionario. Una verdadera aberración.
Recordemos como en el año 1980 cuando el éxodo del Mariel, los homosexuales fueron obligados a salir del país y si no lo hacían se enfrentaban a duras condenas. Fue un capítulo muy triste de nuestra historia ver al pueblo incitado, por el gobierno hacer actos violentos de repudio a todo el que quería emigrar y por supuesto los homosexuales se llevaron la peor parte.
Hace algunos años la hija de Raúl Castro, Mariela Castro fundó una organización llamada Cenesex, para proteger los derechos de la comunidad LGBTIQ+ pero no incluyó a todos, solo a los que simpatizan con el sistema comunista y los que son útiles a la dictadura para mantener una imagen al mundo de tolerancia hacia la diversidad de género. Celebrando por primera vez en Cuba el 17 mayo, el día mundial en contra de la homofobia, Transfobia y la Bifobia.
Mariela para aparentar que en Cuba algo había cambiado, el Cenensex celebra en el 2011 la primera boda entre un transexual y un gay, en 52 años de dictadura. La novia Wendy Iriepa declaró, que no quería que la boda se viera como algo político, aunque señaló que era un regalo para Fidel Castro.
Cuentan que Mariela Castro rechazó ser la madrina, cuando se enteró que el novio Ignacio Estrada pertenece a la oposición. Su lugar lo tomó la bloguera Yoani Sanchez que anunció que la cobertura del acontecimiento, a través de twitter iba hacer minuto a minuto.
También el 5 de diciembre del 2018 Cenesex anuncia con bombos y platillos la apertura del primer hotel para la comunidad LGBTIQ+ en Cuba. Se encuentra ubicado en la provincia de Ciego de Ávila, específicamente en las playas de Cayo Guillermo, el hotel Gran Muthu Rainbow. El Cenesex informó que iba a estar a cargo de la capacitación del personal del hotel. Como era de esperar la inauguración de la instalación fue para los extranjeros.
Los que estuvieron en el encuentro del día 8 de octubre, son ese grupito de aduladores y lamebotas de Mariela Castro del Cenesex, que para mantener algunos privilegios se prestaron para esta farsa del diálogo.
Estos son los mismos activistas de Cenesex que utilizó la dictadura, para desviar la atención sobre los principales temas de la nueva constitución, centrando el debate público en el polémico artículo 68 sobre el matrimonio igualitario. Al final los diputados no incluyeron en la constitución el polémico artículo, argumentando que hubo rechazo de la población. Todos sabemos que fue algo intencional hasta el número que le asignaron a dicho artículo.
La comunidad LBTGIQ+ lo primero que tiene que pedir antes de sentarse con el régimen a discutir algo, es una disculpa sincera y pública por todos estos años de descriminacion y a tropello en contra de su comunidad.
Quiero decirle a la comunidad LBTGIQ+ que no se dialoga con quien da la orden de combate en contra su propio pueblo, no se dialoga con quien amenaza con sacar los tanques a la calle para aplastar al pueblo, no se dialoga con quien tiene las cárceles llenas de presos políticos. El único diálogo es las elecciones libres y que se vayan del poder.
